La familia
Nacieron dos de otros cuerpos
y así se filmó su vida.
Rodaban días y noches,
con adhesión que aprendieron.
La sangre se dividía
cual hilos en los bordados,
siempre musitando entregas
de radios estratosféricos.
Mundos paralelos sin agarre,
cada cual sabe lo que es el mundo.
Se soltaron una mañana
para saber lo que es ser libre
y murieron sabiéndose uno
dejando legados
y firmas de esfinge.